David Bowie estuvo activo hasta los últimos días de su vida, así lo demostró cuando publicó Blackstar, el disco que salió a la venta el viernes anterior a su muerte.
Ahora su productor de toda la vida, Tony Visconti, aseguró que en los últimos días de su vida lo contactó para decirle que tenía 5 demos nuevos y quería grabar un nuevo álbum.
En la misma entrevista, el productor cuenta cómo el músico apareció para la última sesión de grabación de su vida justo al salir de una sesión de quimioterapia, sin cejas ni pelo. Visconti dice que el ímpetu de David Bowie por hacer más música lo motivó porque creía que tendría unos meses más de vida para completar su última obra, pero la vida quiso otra cosa.