El nombre de Paul McCartney está asociado a grandeza artística y es sinónimo de excelentes creaciones musicales. Sin embargo, no todas las obras del ex Beatles tienen su visto bueno. Durante los diez años que duró la banda Wings, el grupo editó siete exitosos álbumes que alcanzaron un amplio reconocimiento, de hecho cuatro de ellos encabezaron los rankings en Estados Unidos. Sin embargo, Back to the Egg, el disco final del conjunto, logró todo lo contrario: malas críticas y un pobre desempeño comercial.
Según recuerda Far Out Magazine, en una entrevista con Reverb, McCartney recordó el LP y dijo: “Lo interesante es que, mirando hacia atrás en parte del trabajo, algunas de las cosas, es mejor de lo que crees que era, pero debido a que recibió críticas tan duras… Los críticos nos dieron a diestra y siniestra, pero yo fui particularmente duro con nosotros. Recuerdo mirar un libro y había un álbum que hicimos, creo que fue Back to the Egg, al que no le fue bien, y recuerdo haber pensado: ‘Dios, fue un completo desastre’“.
Sin embargo, McCartney reflexionó tras una conversación con David Bowie y reevaluó su postura sobre el álbum: “Años después, recuerdo haberlo visto con Bowie en este viejo libro, uno de esos libros que hablan sobre quién hizo cada cosa de Hit Parade, buscándolo, y era como el número 8 en Estados Unidos. En ese momento pensé: ‘La mayoría de la gente daría sus malditos brazos derechos por estar en esa posición’. Pero era el octavo y yo no estaba satisfecho, porque los Beatles habían sido el número 1. Esto está bien, te mantiene en marcha. Pero sí, muchas de las cosas están subestimadas por eso”, concluyó McCartney.