Los Ramones están lejos de haber sido una banda más en la historia de la música, especialmente dentro del punk, sino que fueron uno de los grupos que ayudó al género a cimentarse y lo catapultó a las masas. La importancia de Joey Ramone y los suyos dentro del punk es tal que el mismísimo Butch Vig, uno de los productores y músicos más destacados de las últimas décadas, comentó que uno de sus discos es el que “comenzó y terminó con el punk rock”.
Según recuerda Far Out Magazine, en una entrevista con Louder Sound en 2015, el responsable de estar detrás de la consola en proyectos icónicos como Nevermind de Nirvana y Wasting Light de Foo Fighters (por nombrar solo dos) fue desafiado a elegir los diez álbumes que cambiaron su vida. En ese diálogo, el oriundo de Viroqua (Wisconsin), seleccionó el LP homónimo de los músicos de Nueva York, al cual describió como “el disco que comenzó y terminó con el punk rock, la palabra definitiva”.
“Dos canciones pop de dos minutos y medio con coros de gritos, producción muy simple y toques de guitarra. No se necesitaba nada más”, agregó Vig. Acto seguido, aseguró: “No creo que haya ningún grupo de punk anterior o posterior que iguale a los Ramones. Para mí y para muchos fanáticos, este es el álbum que inició todo”.
“Muchas de las bandas británicas que surgieron del punk vieron a los Ramones en su primera gira”, señaló. “Después de que ellos tocaran en el Reino Unido, de repente el país tenía 200 conjuntos de punk. Todos estaban tratando de hacer lo que los Ramones ya estaban haciendo”. Finalmente, Vig cerró aclamando el sonido del disco producido por Craig Leon y T. Erdelyi, y publicado por el sello Sire Records el 23 de abril de 1976.
“La producción es innovadora. Es lo-fi, pero suena brillante, así que en ese nivel es influyente. Pero eso no importaría si las canciones no estuvieran ahí, y estos temas son tremendos. Los Ramones escribieron maravillosos y pegadizos tracks de pop, y los tocaron fuerte y rápido”, concluyó.