En la historia del punk hubo duplas icónicas: una fue Joey y Johnny Ramone, mientras que otra fue Sid Vicious y Johnny Rotten. Al igual que su banda, la relación entre ambos músicos británicos fue intensa y estuvo marcada por los excesos. Es por eso que, incluso al día de hoy, Rotten se siente culpable por la muerte de quien fue el bajista de los Sex Pistols.
Así lo declaró Lydon -su verdadero apellido- en una entrevista televisiva. En sus propias palabras, lamenta haber presentado al fallecido músico a Nancy Spungen, pues fue ella quien le hizo probar la heroína por primera vez:
“Heroína… Bueno, mata a todos, ya saben cómo es. Esa Nancy le enseñó todo eso. [Sid] era muy joven e ingenuo para conocer esas cosas. La mayor ironía de todas es saber que nunca habría salido con una chica como Nancy a menos que yo se la hubiera presentado, lo cual hice. Así que asumo una gran responsabilidad en la muerte de Sid por eso. Extraño a mis amigos”.
Sid y Nancy: un vínculo destructivo
La relación entre Vicious y Spungen es una de las más controvertidas y trágicas de la historia del rock. Su tumultuoso vínculo, marcado por el abuso de drogas y episodios de violencia, terminó en tragedia y fue tema de múltiples documentales, libros y películas.
El 12 de octubre de 1978, Nancy fue encontrada muerta en el baño del Hotel Chelsea en Nueva York. Había sido apuñalada en el abdomen y Vicious fue arrestado y acusado del asesinato de Nancy, pero nunca tuvo la oportunidad de enfrentar un juicio.
Meses después, Sid murió a los 21 años debido a una sobredosis de heroína en la misma habitación donde vivía con Nancy. Su muerte cerró un capítulo oscuro en la historia del punk, pero dejó un legado duradero que sigue incluso al día de hoy.
