The Beatles ha sido nombrada muchas veces como la banda que lo inventó todo. Y si bien los Fab Four hicieron un cambio radical en la música popular, siendo influencia para bandas que van desde Black Sabbath hasta artistas pop, también tuvieron sus modelos a seguir que pueden verse en sus composiciones.
En su primera época, The Beatles estaban muy apegados al rock and roll, a la herencia de Elvis y un pop que calara rápidamente en las audiencias y divirtiera. Con el correr de los álbumes, la banda se animó a baladas más intimistas hasta llegar a los extremos de la experimentación y sorprender pasando por todos los géneros y, de hecho, hasta inventando algunos.
Fue en el álbum Help!, de 1965 que John Lennon dejó ver una nueva faceta, apostando a una composición sincera, fuera de los cánones de lo hitero y más conectado con su subjetividad. Así nació “You’ve Got to Hide Your Love Away“, un balada en la que predomina la guitarra acústica y la voz. Incluso con un toque de nostalgia, John probó una letra intimista y con una interpretación muy particular.
Es la manera de cantar que adoptó Lennon para esta canción y el tipo de melodía lo que llevó a los fans a relacionarla directamente con el estilo de Bob Dylan. Y si escuchaste esta reminiscencia no estabas errado. El hecho es que en ese momento John estaba bastante influenciado por el cantautor. Fue en 1964 que los Beatles se habían conocido con Dylan y claramente la música atravesó este vínculo.
El mismo Paul McCartney, compañero predilecto de composición de Lennon, sugirió en una entrevista 1984 (vía Far Out): “Ese era John imitando a Dylan… muy influenciado por Bob. Si prestas atención, está cantando como Bob”.
Unos años antes, en 1980 durante una entrevista con Playboy, Lennon lo había explicado a la perfección:
“Ese soy yo en mi período Dylan otra vez. Soy como un camaleón… influenciado por lo que sea que esté pasando. Si Elvis puede hacerlo, yo también. Si los Everly Brothers pueden hacerlo, Paul y yo podemos. Lo mismo pasa con Dylan”.
En The Beatles Anthology, Lennon reveló cómo atravesaba ese momento compositivo y que fue Dylan quien le ayudó a hacer consciente este proceso: “Es una de esas canciones que cantás un poco triste para vos mismo. Empecé a pensar en mis propias emociones”.
Más adelante en sus composiciones, John siguió con la misma permeabilidad a las nuevas músicas y en sus canciones se pueden ver influencias contemporáneas. Es el caso de “Sun King”, una de las canciones finales de The Beatles, muy emparentada con “Albatross” de Fleetwood Mac.