Esta semana Maria Alyokhina, miembro del grupo punk protestante Pussy Riot, confesó que tuvo que escapar de Rusia disfrazada como una empleada de delivery de una app después de sus declaraciones en contra del régimen del presidente ruso Vladimir Putin. Además, la artista compartió fotos de ella y su pareja para mostrar cómo lo hicieron.
En una entrevista con el New York Times, Alyokhina expresó que, aunque más de una vez se negó a abandonar su país a pesar de haber sido arrestada y encarcelada muchas veces, tomó la decisión de abandonar la ciudad de Moscú después de que las autoridades rusas le comunicaran que debería cumplir su condena en una colonia penal. La artista estaba cumpliendo con un “arresto domiciliario efectivo” por haber convocado a una manifestación no autorizada en contexto de pandemia en contra de Putin.
Para evitar ser detectada, se vistió con una campera inflable de color verde que normalmente usan los mensajeros de delivery por aplicaciones. En las fotos que María compartió con el Times, se muestra a su novia usando las prendas con la típica mochila para llevar los pedidos en la espalda.
“No creo que Rusia tenga derecho a existir más“, expresó la música que ahora se encuentra en Lituania. “Antes nos cuestionábamos sobre cómo esa nación está unida, con qué valores lo está y hacia dónde va. Ahora creo que ya nos es más un interrogante”, añadió sobre la situación actual de su país natal.
Alyokhina, como ella misma menciona, ya fue arrestada varias veces durante la última década por sus intervenciones con las Pussy Riot. El grupo se hizo conocido internacionalmente en 2012, cuando interpretaron un himno de protesta en contra de Putin criticando al Kremlin y a la Iglesia Ortodoxa rusa dentro de una catedral de Moscú.
