El 27 de julio de 1984, Metallica editó Ride The Lightning, su aclamado segundo disco de estudio que, compuesto por temas como “Fade to Black”, “Creeping Death”, “For Whom the Bell Tolls” y la canción que le da nombre al álbum, tiene muchos recursos para pelear a la hora de hablar de los mejores proyectos de la banda californiana.
Claro está, por aquel entonces, el grupo (en ese momento) compuesto por James Hetfield, Kirk Hammett, Cliff Burton y Lars Ulrich no contaba con la misma experiencia que hoy en día, y el productor del LP, Flemming Rasmussen, confesó que no fue fácil lidiar con algunos aspectos a la hora de grabar.
En una entrevista con Metal Hammer, el danés confesó que Lars tenía un problema importante con acelerar y ralentizar impulsivamente el ritmo de los tracks a medida que estos avanzaban.
“Pensé que [él] era absolutamente inútil”, reconoció sobre su parecer al respecto de su compatriota. “Lo primero que le pregunté cuando empezó a tocar fue: ‘¿Todo empieza con un upbeat?’, y él dijo: ‘¿Qué es un upbeat?’”.
El también ingeniero, mixer y fundador de los Sweet Silence Studios en Copenhague agregó:
“Empezamos a hablarle de los beats. Que tienen que pasar el mismo tiempo entre ese golpe, ese golpe y ese golpe, y tenés que ser capaz de contar hasta cuatro antes de volver a entrar. Entonces podría tocar un relleno realmente bueno que nadie más había pensado en hacer en ese momento” .
Además, Flemming recordó cómo la banda emblema del thrash metal usó un yunque real en “For Whom the Bell Tolls”, diciendo: “Lo pusimos en una escalera de servicio cuando lo grabamos. Eso fue ridículo, pesaba una tonelada. Pero Lars lo golpeó y sonó realmente bien. Eso fue antes de los samplers, así que tuvimos que hacer nuestros propios sonidos”.