Nirvana terminó hace 26 años con la muerte de Kurt Cobain. Con menos de 30, los miembros de la banda grunge más popular de los 90 quedaron desamparados y con un hueco imposible de llenar y, tras cuatro discos de estudio, se separaron dejando un gran legado. El mismo año de la muerte de Kurt, Dave Grohl entró al estudio y creó Foo Fighters para seguir su carrera en la música, pero el camino no fue el mismo para el bajista, Krist Novoselic, quien luego de la ruptura dejó la música de lado. Por su parte, Pat Smear, miembro satélite del grupo de Seattle, terminó por unirse a Foo Fighters con Grohl.
Sin embargo, los diferentes caminos no han impedido que los excompañeros de banda sigan sosteniendo un vínculo: “Krist Novoselic es piloto, vuela en su propio avión. Vive en el noroeste del Pacífico y cuando viene a Los Ángeles siempre nos juntamos a cenar y a tocar, nos encanta vernos”, reveló Grohl en una entrevista con Howard Stern. Y prosiguió: “La última vez que estuvo acá, preparé la cena y pasamos el rato. Pat siempre está cerca y a nosotros tres nos gusta pasar tiempo juntos. Nos gusta vernos y, si hay instrumentos alrededor o un estudio disponible, simplemente nos ponemos a improvisar“.
Lo más sorprendente fue que efectivamente hay música nueva de los exmiembros de Nirvana. Si bien no ha sido creada con el objetivo de ser lanzada, tanto Grohl como Smear han admitido que suelen juntarse a tocar y mucho de esto queda registrado. “Nos encanta perder el tiempo y, a veces, cuando estamos jugando, las canciones suceden, y si estamos en el estudio, además las grabamos. Así que tenemos algunas cosas que son realmente geniales. Pero nunca hicimos nada con eso. Es más como una cosa de amigos improvisando, no una gran reunión oficial”, expresaron.
“Es muy casual, algo que hacemos por diversión, pero nos recuerda que cuando los tres estamos haciendo música en una habitación, todavía sonamos como lo hacíamos antes. Todavía suena como Nirvana“, reconocieron los dos exmiembros en diálogo como Stern, aunque también revelaron que no revisitan los discos de la banda o las canciones, porque muchas veces les resulta doloroso.