Hoy 22 de noviembre se celebra en todo el mundo el Día de la Música en conmemoración a la muerte de Santa Cecilia, o Cecilia de Roma, patrona de la música y de los poetas.
Cuenta la leyenda que allá por el siglo V, Cecilia era una noble romana que pese a su voto de virginidad fue forzada a casarse y consumar su matrimonio. La iglesia cristiana la martirizó por romper sus votos y durante la boda, Cecilia se apartó de todo el mundo para cantar sola y ante Dios sus penas. De ahí en más y por ese acto pasó a ser patrona de los músicos, y a ser representada con un órgano y un laúd.
Desde el siglo XVI, y con un primer registro en 1570 en Normandía (Francia), el viejo continente celebra hoy el Día del Músico con festivales, obras honoríficas y conciertos de todo tipo. La tradición, extendida primero por Europa, llegó a tierras latinoamericanas vía Rio de Janeiro en 1920, y de ahí se extendió hacia el norte y hacia el sur.
En Argentina, sin embargo, en vez de conmemorar a mártires romanas del cristianismo preferimos rendir homenaje a un músico real, contemporáneo, y acaso uno de los mejores: el Flaco Spinetta. Por iniciativa del Instituto Nacional de la Música (INAMU) y aprobado por unanimidad en Cámara de Senadores en 2014, Argentina celebra el Día del Músico el 23 de enero, en honor al nacimiento de Luis Alberto Spinetta.
Así que feliz día, o no, para todos los músicos.