Taylor Swift es una de las estrellas más importantes del mundo y esto puede traer aparejados algunos aspectos negativos. Mientras su carrera musical no deja de darle grandes satisfacciones -como haber ganado su cuarto Grammy a Álbum del año-, también la ha puesto en peligro, por eso sus abogados han tomado cartas en el asunto.
El equipo jurídico de la cantante le envió un cese y desista a Jack Sweeney, un estudiante de la Universidad Central de Florida que se dedicó a rastrear y publicar información sobre las rutas del jet privado de Swift. Esta actividad fue considerada un acoso, por lo que lo intimaron.
“Mientras esto puede ser un juego para ti, o una ruta que esperas que te lleve a la riqueza o la fama, es un asunto de vida o muerte para nuestra clienta”, expresaron según recogió The Washington Post. También aclararon que esto causó un “daño directo e irreparable, además de estrés emocional y físico” en la artista.
Sweeney solo compartió información que está disponible para cualquiera, ya que fue publicada por la Administración Federal de Aviación. Gracias a estos datos, ha quedado al descubierto que la cantante de “Shake It Off” es una de las celebridades que más uso hace de su jet privado, causando así un daño ambiental significativo.
“Esta información ya está ahí afuera. Su equipo cree que puede controlar el mundo“, expresó Sweeney al mencionado medio, diciendo que se sintió intimidado. En el año 2022 Sweeney también tuvo problemas con Elon Musk por el mismo tema, y el mega empresario decidió bannearlo de X.