The Beatles, o mayormente conocido como The White Album, es uno de los discos más exitosos de los Beatles y, de las 30 canciones que lo componen, 19 fueron escritas durante marzo y abril de 1968 en un curso de Meditación Trascendental en Rishikesh, India. Sin embargo, esta experiencia de los Fab Four no fue lo único que los inspiró.
La influencia de Prudence Farrow
Para su track “Dear Prudence”, John Lennon escribió sobre la hermana de Mia Farrow, Prudence Farrow, quien rara vez salía de su habitación durante la estadía en el país asiático debido a que estaba sumamente comprometida con la meditación. “Estar en ese curso era más importante para mí que cualquier otra cosa en el mundo”, le dijo la productora de cine a Steve Turner para el libro A Hard Day’s Write.
“Estaba muy concentrada en hacer la mayor cantidad de meditación posible, de modo que pudiera obtener suficiente experiencia para enseñarlo yo misma. Sabía que debía haber sobresalido porque siempre regresaba corriendo a mi habitación después de las conferencias y las comidas para poder meditar. John, George y Paul querían sentarse a tocar y pasar un buen rato y yo volaba hacia mi habitación. Todos hablaban en serio sobre lo que estaban haciendo, pero no eran tan fanáticos como yo”, agregó.
La técnica de Donovan
Sin embargo, esa no fue la única influencia de Lennon, sino que también se inspiró en Donovan, más precisamente en su modo de tocar la guitarra con los dedos, algo que escuchó durante una sesión de improvisación nocturna. En un episodio de The South Bank Show en 2004, el músico escocés recordó: “Cuando estábamos en la India, John dijo: ‘¿Cómo haces eso?’. Yo dije: ‘¿Qué?’, y él me respondió: ‘Esas cosas con tus dedos’. ‘Es un patrón’, le contesté. Tres días después lo había aprendido y se abrió un mundo completamente nuevo para su composición. ‘Dear Prudence, ¿no quieres salir a jugar?’”.
De igual manera, ese mismo estilo de guitarra pulsada se iba a escuchar en varias de las otras canciones de The White Album, incluyendo “Happiness Is A Warm Gun” y “Julia”. El citado medio británico afirma que “así como la meditación pudo haber permitido a Lennon quitar algunas capas de ego, la lección de Donovan le permitió acceder a algo orgánico, psicológicamente complejo y, bastante contradictorio, verdaderamente original”.