Es sabido que los últimos años de The Beatles fueron altamente turbulentos. La banda duró poco en comparación al impacto inconmensurable que tuvieron en la música y la cultura, ya que hacia el final las relaciones personales se fueron haciendo cada vez más complejas y las composiciones cada vez más individuales. Algo de esto pudimos ver en The Beatles: Get Back, el documental que Peter Jackson estrenó en Disney+, pero existen muchas historias de personas que vivieron desde adentro la desintegración.
Uno de ellos es el ingeniero de grabación Geoff Emerick, quien trabajó con los Fab Four desde Revolver hasta que llegó el momento de grabar el White Album, un disco doble que estuvo compuesto de eclécticas canciones y gran parte fue compuesto en el retiro que la banda hizo a la India. Más allá de lo musical, la cosas entre los integrantes no estaban en armonía, lo cual hizo que Emerick decidiera abandonar el proyecto.
“Perdí interés en el White Album porque realmente estaban discutiendo entre ellos e insultándose. Los improperios estaban en el aire… Y le dije a George Martin, ‘Mira, ya tuve demasiado. Me quiero ir. No quiero saber más nada’. Y George me dijo, ‘Bueno, vete al final de la semana’ -creo que era lunes o martes- pero yo dije ‘No, me quiero ir ahora, en este instante’. Y eso fue todo”, relató Emerick en The Complete Beatles Recording Sessions de Mark Lewisohn (vía Far Out).
Por más descabellado que parezca, el ambiente fue insoportable para el ingeniero. De todos modos, Emerick volvió a trabajar con The Beatles en Abbey Road, el disco final de la banda, y posteriormente también sería el ingeniero de grabación de muchos discos de Paul McCartney, específicamente Band on the Run y Tug of War.