Uno de los discos más importantes y celebrados de la carrera de Metallica es Ride the Lightning (1984), que cuenta con grandes canciones como la metalera “Fight Fire With Fire” y la balada “Fade to Black”. Sin embargo, una de las más curiosas de este disco es la homónima que cuenta con la participación del baterista Lars Ulrich en los coros. Este es el único track de la banda de Los Ángeles en el que el músico aportó su voz, y esta decisión se relacionó con la búsqueda de dramatismo y contundencia.
Este tema tiene una duración de más de seis minutos y cuenta la historia de un hombre que está a punto de ser ejecutado en una silla eléctrica, aunque ha sido acusado injustamente. La narración es en primera persona, por lo que James Hetfield expresa los sentimientos del hombre y en un momento de la canción grita: “I don’t want to die” (“No quiero morirme”). Allí aparece la voz de Ulrich gritando con desesperación porque ha llegado su final y está en plena agonía.
Lo cierto es que el aporte de Ulrich suma un alto grado de dramatismo a la canción, ya que expresa el más hondo sentimiento de terror y dolor, que retrata el final de la vida de una manera violenta e injusta. Fue en el documental Some Kind of Monster que Ulrich intentó recrear este grito, que se ha vuelto una curiosidad dentro de su desempeño en Metallica.