Este fin de semana se llevó a cabo el festival Primavera Sound Buenos Aires con dos días a pura música. Artistas de distintos géneros pusieron el corazón al frente del Escenario Heineken para complacer a los miles y miles de asistentes que revoloteaban por el predio. A continuación, un breve repaso de lo sucedido en la Costanera Sur de Buenos Aires.
Mhtresuno fue quien estuvo a cargo de cortar el listón, una de las promesas de la escena de trap local. “La triple”, “No tenemos miedo” y “Ricky” dieron fe de que la inminente explosión del proyecto de Martín Herrera. Por eso, el joven artista le sacó provecho a la temprana presentación para atestiguar su aporte colosal a la cultura hip-hop como productor y rapero.
Dos días después de brillar en Niceto Club con un show más íntimo en el marco del Primavera en la Ciudad, Amaia redobló la apuesta en el escenario Heineken. La cantautora española conquistó al público con una voz celestial y contemplativa, fiel a su carisma singular. Entre sonrisas, las penas se diluían en melodías. La música de Amaia tiene ese encanto de pulir la melancolía para convertirla en algo mejor: un repertorio repleto de emociones a flor de piel.
Al retumbar la poderosa distorsión de los primeros acordes, una multitud expectante y enérgica abrió un círculo enorme para darle la bienvenida a El Doctor. El rapero evidenció la filosa verborragia y el sonido demoledor de su segundo disco, Fafa (2021). Relució su sentido del humor, la irreverencia y la empatía con su gente al incentivar la lucha por los sueños propios. No solo eso, a raíz de la viralización de su nombre en el line-up del Primavera Sound, El Doctor se dio el lujo de reafirmar su amor por Björk y aclarar su felicidad por tocar el mismo día que Travis Scott.
Llegada la noche, fue el turno de Föllakzoid. La banda chilena arremetió con un setlist cargado de rock y psicodelia repasando lo mejor de su discografía. La energía brotaba entre la gente mientras la luz azul del escenario hacía más surrealista la cuestión, como un sueño electrizante que se apoderaba de nuestras mentes en cada canción. La increíble propuesta de la agrupación no dejó lugar a dudas de su poderío, su mística y constante ebullición.
Miranda! estuvo a cargo del cierre de la jornada en el escenario Heineken. El icónico dúo argentino eclipsó las llamas de Travis Scott con un puñado de éxitos pop como “Don”, “Traición” y “Yo te diré”, entre otras. Entre clásicos inolvidables también floreció lo nuevo, como “Me gustas tanto” y “Por amar al amor” de su más reciente Souvenir. Miranda! tiene la fórmula de rejuvenecimiento, su jovialidad es algo indiscutido al presenciar tanto color, tanta energía y tanta pasión. Pueden pasar los años, y siempre va a seguir sonando contemporáneo.
El repentino cambio de horario puso a Carolina Durante al comienzo del segundo día. La banda madrileña se ganó nuestros corazones cuando estrenó “10” en honor a Lionel Messi, un tema aclamado por la gente en vísperas del mundial. Además, la agrupación compartía line-up con muchos artistas cercanos, como Amaia, Los Planetas y Santiago Motorizado, por eso no tardaron en sentirse como en su propia casa. Se despidieron diciendo que éramos el mejor público de Latinoamérica, algo que no solía decirlo en otros países.
Santiago Motorizado también estuvo presente. El músico platense brindó un show especial con canciones de su faceta solista y algunas reversiones infaltables de El Mató (“Yoni B”, “La noche eterna” y “El tesoro”). Entre algunos covers, sorprendió a sus seguidores con una versión muy personal de “Soy rebelde” de Jeannete junto a Pipe Quintans en el piano eléctrico. Además, nos deleitó con un homenaje a 107 Faunos (“Jazmín chino”) y Las Ligas Menores (“Europa”), sus bandas favorita de todo el mundo, según admitió. Vale recordar que Motorizado ya es conocido en el Primavera Sound, no solo ofreció un sideshow en Complejo C Art Media, sino que ya tiene un amplio recorrido por la sede española.
Una vez terminado el show, varios se sumaron al Beer Garden de Heineken: un espacio cuidado y apto para mayores de 18 años con árboles integrados y pasarelas en altura desde donde se podían disfrutar de los escenarios más cercanos. Fueron varios los que decidieron disfrutar de una cerveza en la terraza mientras sonaban las primeras canciones de Interpol.
Coincidir horario con Arctic Monkeys no fue un impedimento para el resplandor de Arca. En la furia temporal, los aplausos exigían la aparición de la bruja venezolana. Luego la verdadera tormenta se desató arriba del escenario: un show frenético y desconcertante que puso a toda la gente en movimiento. Un estado de trance colectivo en donde ya no importaba ni el agua, ni el frío, porque nuestros cuerpos fueron trasladados a otra dimensión. Tan visceral como excéntrica, Arca lo dio todo: estímulos, sentimientos y ensoñaciones sin perder equilibrio en ningún momento. No llegó a despedirse, que ya aclamaban su pronto regreso.
Tras la suspensión del festival por la persistente lluvia, lamentamos no haber podido escuchar a Boy Harsher, el dúo encargado de cerrar la noche en el Escenario Heineken. Sin embargo, el Primavera Sound nos cautivó de sobra y Heineken nos invitó a disfrutar de la mejor música en vivo: una experiencia única para disfrutar de la música que nos gusta y de la que nos va a gustar.