Sin lugar a dudas, Poco Ortodoxa se convirtió en una de las series del momento en Netflix y sus cuatro episodios dejaron con ganas de más a muchas personas. Es por esto que, a pesar de haber debutado en la plataforma hace apenas semanas, no sorprende que no sean pocos los que se pregunten por si habrá una segunda temporada.
La tira, ligeramente basada en la autobiografía de 2012 de Deborah Feldman, Unorthodox: The Scandalous Rejection of My Hasidic Roots, arribó al gigante del streaming el 26 de marzo, por lo que todavía es muy temprano para andar pensando en una segunda entrega, pero no caben dudas de que ganas por parte de los fans no faltan.
Si bien no existe una certeza en torno a la continuidad de la historia de Esther “Esty” Shapiro (Shira Haas), la joven de una familia ultra ortodoxa de Brooklyn que a los 19 años decide dejar su vida en EE.UU. y viajar a Berlín para reencontrarse con su madre, hay tres datos que alimentan las esperanzas de los abonados de Netflix.
1. Como ya señalamos, solo cuatro episodios conforman la primera entrega, una rareza total que invita a creer que la compañía de Los Gatos eligió la estrategia del relato a cuentagotas para dejar con las ganas a los televidentes y generar euforia en la segunda temporada. Sumado a esto, cabe recordar que en el capítulo final restan contestarse media decena de preguntas y no hay resolución de la trama.
2. En 2014, Feldman publicó Exodus: A Memoir, la continuación de su historia donde relata sus viajes por Europa y América, y (¡spoiler alert a continuación!) cómo crió a su hijo mientras luchaba con su pasado religioso. Este segundo libro y el hecho de que Netflix no se haya apegado al cien por ciento al relato de la escritora abre un mundo de posibilidades para que la tira continúe.
3. Al fin y al cabo, lo más importante en el mundo del streaming siempre van a ser los suscriptores y las reproducciones que cada título consiga, por lo que, dado el alto nivel de audiencia de Poco Ortodoxa, no sorprendería a nadie que la empresa fundada por Reed Hastings y Marc Randolph opte por cambiar de parecer y se aventure a una segunda temporada.
