Podría decirse que J.K. Rowling ha sido “cancelada”. A partir de sus comentarios transfóbicos que aparecieron en Twitter en 2020 cuando ella rechazó hablar de “hombres que menstrúan”, gran parte de la comunidad LGBT le quitó el mote de ídola e incluso un importante sector de su fandom la desestimó al igual que todas las producciones literarias y audiovisuales en las que estuviera involucrada. Incluso el propio Daniel Radcliffe se pronunció en contra de los dichos de la autora de Harry Potter.
Fiel a sus ideas, la escritora británica no dio un paso atrás en torno a sus publicaciones y siguió siendo parte de producciones basadas en la historia del mago adolescente. Recientemente se conoció que HBO estará a cargo de la primera serie basada en los libros de Harry Potter, pero esta noticia no ha sido bien recibida, al menos por parte del público, quienes planean realizar un boicot. Ante las expresiones en redes sociales de este boicot organizado, Rowling no se quedó callada y se manifestó en Twitter con fuertes dosis de sarcasmo.
“Terribles noticias, que me siento obligada a compartir. Los activistas en mis menciones están tratando de organizar otro boicot a mi trabajo, esta vez a la serie de Harry Potter. Como el que está advertido está preparado, he tomado la precaución de tener una gran reserva de champán esperando”, escribió en la red social del pajarito dando poca importancia a sus llamados “haters”.
En torno a este tema también se pronunció el jefe de contenido de HBO, Casey Bloys, en diálogo con The Independent: “Esa es una discusión muy propia de internet. Muy delicada y complicada, y algo en lo que no nos vamos a meter”, expresó desentendiéndose de la situación, que en muchos aspectos sí se circunscribe al ámbito de redes sociales.