La vida de Pi es un filme norteamericano basado en la novela homónima del escritor canadiense Yann Martel y estrenado en 2012. La película fue dirigida por el laureado cineasta taiwanés Ang Lee (Hulk, Brokeback Mountain, The Ice Storm) y protagonizada por Suraj Sharma, Rafe Spall e Irrfan Khan. Tuvo 11 nominaciones a los Premios Oscar, ganando a Mejor Director, Mejor Fotografía, Mejores Efectos Visuales y Mejor Banda Sonora. Recaudó más de 609 millones de dólares en todo el mundo y ostenta excelentes calificaciones en plataformas como Rotten Tomatoes y Google Play.
La trama es cautivadora desde el inicio: Santosh y Gita son un matrimonio hindú que vende su zoológico para poder viajar a Canadá junto con sus hijos y unos cuantos animales. Lamentablemente, una catastrófica tormenta hunde el barco carguero donde viajaban, quedando como único sobreviviente humano el pequeño Pi. No obstante, Pi estará acompañado de un enorme tigre de bengala que viajará con él sobre un bote salvavidas. Con el pasar de los meses, hombre y animal deberán esforzarse para confiar mutuamente si desean mantenerse con vida en aquel impredecible devenir sobre el océano.
Como toda gran película, existen numerosas curiosidades sobre el rodaje, la pre y post producción, además de los pequeños ‘mitos’ que rodean a las obras de este calibre. Por ejemplo, inicialmente no fue Ang Lee el principal candidato a dirigir la película, sino que se evaluaba para esta labor a Alfonso Cuarón, a Jean-Pierre Jeunet y a M. Night Shyamalan. Finalmente, Fox 2000 Pictures optó por el director taiwanés.
El perfeccionismo de Lee se evidencia en cada pasaje del filme. Para lograr credibilidad en la situación trágica que experimenta Pi, el director contrató a Steven Callahan, un estadounidense que sobrevivió en un bote durante casi 80 días después de un naufragio. Además, se rumorea que utilizó 4 tigres durante las grabaciones, teniendo todo tipo de cuidados para no perjudicar ni a los animales ni a las personas en el estudio. Sin embargo, se comenta que uno de los felinos casi fallece en una de las tomas.
Precisamente, para evitar cualquier exposición al peligro del actor Suraj Sharma (Pi), el equipo técnico introdujo las escenas del tigre en posproducción.
Pero fue el espectacular uso de la pantalla verde y el 3D lo que más sorprendió a los expertos de la tecnología, como el mismísimo James Cameron. A través de la pantalla verde se crean e incluyen efectos especiales para escenas que resultaría poco convenientes realizarlas en un estudio real. Por ello es que Cameron resaltó: “Life of Pi rompe el paradigma del 3D: tuvo que ser algo grande, un espectáculo fantástico de acción, una película de superhéroes […]. Hace lo que un buen 3D se supone que debe hacer, que es permitirte olvidar que estás viendo una película en 3D”.