Powerpaola es artista plástica, historietista e ilustradora. Nació en Quito, Ecuador. Creció en Cali y Medellín donde estudió Expresión Artística y Artes plásticas. Ha vivido en París, Sídney, Buenos Aires, Bogotá y San Salvador. Ganadora de las residencias artísticas: La Cité Internationale des Arts, París (2003- 2005) y Firstdraft Gallery, Sídney (2007). Ganadora del proyecto «En Vitrina» en Lugar a Dudas, Cali: durante 14 días hizo una performance dentro de una vitrina dibujando lo que tenía al frente. Realizó un club de dibujo en el Amazonas por dos meses gracias a la beca de la Gilberto Alzate Avendaño. Ha expuesto sus Diarios de viaje, dibujos y pinturas en varias galerías como Miss China Rue Française, Galerie Pierre-Alain Challier (París), Burnet Fine Art (Minnesota), Sextante, Valenzuela y Klenner (Bogotá), entre otras, y en ferias como La Fiac, Arco y Slick. Tuvo una muestra individual (2018): De frente me escondo en el Museo La Tertulia de Cali. Autora de Virus Tropical, Por dentro/ Inside, Diario de Powerpaola, qp (Éramos Nosotros), Todo Va a Estar Bien, Nos Vamos, y el libro de artista Amazonas editado por Artedos Gráfico. Pronto lanzará su nuevo libro: Todas las bicicletas que tuve.
Ha hecho varios libros en conjunto con otrxs autorxs como: Mostras del Rock con Barbi Recanati (Futurock en Argentina, Editorial Sigilo en España), Dinamita con Gloria Susan Esquivel (Lumen, Colombia), Costuras con Alejandro Martín (Laguna), Sandiliche con Ronaldo Bressane (Cosacnaify), entre otros. Formó parte del libro An Illustrated Life de Danny Gregory. Hizo parte de los colectivos: Taller 7, Chicks on Comics, No tan Parecidos y La Casa Telepática. Publicó durante 10 años una tira mensual en la revista cultural Arcadia (Colombia). Fue directora artística del largo animado Virus Tropical basado en su novela gráfica.
¿Tus personajes de historieta preferidos?
Generalmente las historietas que me atraen son donde sus autorxs se dibujan a sí mismos y cuentan su vida real o inventada. Pienso en Yuki o la chica de los cigarrillos de Masahiko Matsumoto, en Amy y Jordan de Mark Beyer o en Ulli Lust en Hoy es el último día del resto de tu vida.
¿El mejor lugar para ponerte a dibujar o escribir?
Las salas de espera de citas médicas, trámites burocráticos, del correo porteño o de aeropuertos en general son los lugares en donde todo se me da, nada me distrae y bajo todo a tierra. Creo que es donde he dibujado la mayoría de mis libros. También me gustan los cafés de Buenos Aires, donde hay mucha gente igual de sola que yo, generalmente son personas mayores que están en la suya leyendo el diario o un libro y escribiendo mientras comen medialunas con café con leche. El café no es tan bueno, pero lo que se dibuja en esos lugares hace que valga la pena tomarse uno quemado.
¿De qué libro de tus preferidos, te hubiera gustado ser autora?
Frances de Johanna Hellgren, Parecer es mentir de Dominique Goblet, Whiskey y Nueva York de Julia Wertz, El hombre sin talento de Yoshiharu Tsuge y de todos los fanzines de Muriel Bellini.
¿Un personaje de historieta que te hubiera gustado encarnar en la vida real?
Calvin, el personaje de Calvin y Hobbes de Bill Watterson.
¿El libro de historietas que más te haya flasheado en los últimos meses?
Madriguera de Femimutancia y Arsene Schrauwen de Olivier Schrauwen, uno es novísimo y el otro es de hace algunos años pero me voló la cabeza como juega con la imagen y el texto. Hermosísimos, los dos me conmovieron.
¿Qué discos estás escuchando últimamente?
Corazón y Alma de Perro Fantasma, Party Girl de Michelle Gurevich, Rorschach Test de Jay Jay Johanson y Far In de Helado Negro.
¿A dónde van los historietistas cuando mueren?
Se los comen los gusanos que estos a su vez son comidos por pájaros, vacas o murciélagos, luego ellos los cagan y sirven de abono para los árboles de donde se saca la madera y el papel para seguir dibujando.