El hip-hop argentino atraviesa un momento clave: cada vez más raperos y productores elevan el nivel de la escena. Mir Nicolás lleva años siendo parte de ese movimiento y fue uno de los que abrió nuevos caminos. Junto a Ruin, su compañero en el colectivo Ingrávidos Squad, eligieron los BPMs bajos y el sampling, y se volvieron pioneros de lo que hoy se conoce como grimmey o drumless: nichos que se están haciendo grandes, pero que cuando empezaron no eran tan habitados.

La dupla apostó a ir más despacio que la pequeña escena argentina de rap de ese entonces. Esa decisión los hizo sonar distintos, frescos y con una destreza evidente en barras, estribillos y beats. Ese primer paso fue decisivo y con el tiempo empezó a irradiar hacia toda la movida. Esta historia empieza en la localidad bonaerense de Pablo Podestá, con La ciencia de las malas mañas (2019).

Ingrávidos Squad (la Industria) | La ciencia de las malas mañas

Eso cambió directamente cómo se hacía el rap —cuenta Mir Nicolás en conversación con Indie Hoy—. Por eso suena así, ingrato. En esa época, entre 2017 y 2018, apenas teníamos un estudio. Hacíamos todo, yo era el que más me metía en las sesiones de mezcla y eso. Y la verdad es que tampoco entendía mucho. Aprendimos un montón con ese disco, pero eso sembró el sonido nuevo de Argentina. Creo que Ruin fue muy ingenioso; siempre me llevaba para ese lado. Y yo también, justo íbamos los dos para esa movida. Hagamos esto, pero también tengamos esta vertiente nueva que estamos creando nosotros, que no existe acá. Lo que ahora se dice grimmey. Nosotros ni siquiera lo llamábamos así, le decíamos no sé… mierda lenta”.

La apuesta por bajar los BPMs venía también de lo que escuchaban en ese momento: DJ Screw, el histórico DJ de Texas que en los 90 se hizo reconocido por pitchear los temas hasta volverlos lentísimos y editarlos en cassettes. Esa influencia terminó filtrándose en el proyecto y, con el tiempo, en la escena.

"Ahora que lo veo después de años, puedo ver que Ingrávidos fue muy importante acá, cambió cómo se empezó a trabajar la música. Más que hacernos conocidos y todo eso, estoy orgulloso de haber hecho algo tan importante con el Ruin: traer una música nueva, algo fresco, algo que influencie. Y ya lo hacíamos antes de escuchar a Westside Gunn y todo eso", afirma Nico en referencia a la camada de raperos del sello Griselda Records, de donde salieron Westside Gunn, Conway The Machine y otros grandes influyentes.

Mir Nicolás.
Mir Nicolás. Fotos: Santiago Galafassi.

Pero Nico —además de ser de los primeros en traer nombres de productores y raperos del exterior, importando material, formas y estilos— supo hacer con eso otra cosa. No porque sea radicalmente distinto, sino porque su obra tomó un camino propio, una manera más rioplatense. “Hago internacional la jerga podestina”, dice en "No vale enojarse", y claro está que la jerga podestina puede ser muy diferente a la de un rapero yankee, inglés o español.

La cuestión rioplatense no es la única distinción de Nico y tampoco se limita a la jerga. Pero es deslumbrante cuando un artista logra diferenciarse por su discurso, y Nico no solo lo mantiene, sino que lo enfatiza. En una cultura donde algunos raperos ponen al frente el código postal de su barrio, esta es una actitud natural: es un espacio donde conviven las variopintas jergas de distintos lugares, vivas y compartidas en comunidad. Nico instala, con un trabajo de hormiga en distintas partes del mundo, su fraseo, su humor y sus bajadas políticas sobre la coyuntura argentina como un estilo, y lo mantiene. Este valor se deja ver analizando su obra en en toda su extensión.

También logra reivindicar la música y la cultura argentina de un modo que hace que jóvenes de nuevas generaciones se acerquen genuinamente a los artistas de nuestra historia. En 2024 sacó Spinettaje intenso, un proyecto que bien podría llamarse un disco doble, en honor a su ambición. La primera entrega se presenta como un plato delicatessen compuesto por samples tomados íntegramente de discos argentinos: Spinetta, sí, pero también bandas de rock psicodélico de los 70 de Tucumán como Redd, además de Valeria Lynch, Charly García y muchos más, junto con aportes de N Whise Allah, Varoner, Holy K, Mar Marzo y Dano.

Mir Nicolás - Intro + A o B (Video Oficial)

El álbum también incorpora samples históricos de televisión, cine, momentos del fútbol o entrevistas, mostrando un trabajo delicado, religioso y espiritual: diggear exhaustivamente, conseguir la edición de cada vinilo, cuidar cada verso con precisión, sin dejar de escupir rimas estrafalarias. Otro aspecto a destacar son los homenajes en forma de samples a grupos pioneros como Sindicato Argentino de Hip Hop, y una mención a Tortu de La Conexión Real.

A veces lo nuevo aparece sin que nos demos cuenta. A partir de Spinettaje inntenso, Mir Nicolás empezó a contagiar una práctica: limitarse a usar samples de una región y escarbar en la propia historia se volvió una fuente de inspiración. En 2025, por ejemplo, el salteño Alkoy publicó Valle Chacal Ki, un disco con samples del folklore de su provincia que fue elegido como uno de los mejores álbumes argentinos del año en Indie Hoy.

Hay un ánimo en Mir Nicolás de dejar el hip hop nacional mejor que como lo encontró —sentencia la crítica Flor Viva en su reseña de Spinettaje intenso para el medio Lúcuma—. Es un disco pero también una respuesta inesquivable a algunos debates que atañen al patriotismo y sus formas contemporáneas, al involucramiento de los artistas con el mundo que los rodea. A las generaciones de músicos jóvenes, su conocimiento sobre la idiosincrasia, y hasta el humor y la política nacional".

Para cerrar la era Spinettaje, Nico no se quedó tranquilo: la segunda entrega incluyó una producción de drumless mucho más disruptiva que antes, más atmosférica y enfocada en hilar fino al oído. Se pueden reconocer sonidos de city pop, menciones a Eduardo Galeano, el hitazo "Polígono" junto a la cantante Constanza, referencias históricas del fútbol y la afirmación de mantenerse cerca del proletariado. Entre la innovación sonora y el filo de las barras, es un Spinettaje remix en sentido conceptual, porque el disco contiene solo temas nuevos y más feats que le dan a Mir Nicolás una proyección internacional.

Polígono

La progresión entre las entregas fue atinada. “Al argentino, al entrarle con cosas nuevas, no podés tirarle todo así nomás —explica Nico—. Tenés que sentarlo, explicarle y ser carismático con ese aprendizaje. Entonces, primero los raps. Nosotros teníamos todo preparado desde hace rato, ya estaba meditado”.

Para nada conforme con un disco doble, Nico continuó publicando un pequeño disco con el productor y beatmaker español C Spaulding grabado en Barcelona y titulado A BCN Dream (2025). El trabajo de Spaulding es sublime, como si pudiéramos escuchar la nitidez del agua cristalina de una fuente, mientras que Nico rapea sobre seguir siendo productor “corte el Chato Prada” y trata a alguien que cambia de bando fácil de ser “Lilita Carrió”.

Es la conjunción de una búsqueda musical enteramente argentina y de su insistencia en referencias muy específicas lo que mantiene a Nico dentro de su identidad criolla, por más que el disco lleve el nombre de una ciudad española. Por eso, cuando este año anunció un disco de city pop, se esperaba que se tratara del género más bien perteneciente a Japón, un estilo de pop urbano y sofisticado de los 70 y 80, con influencias de jazz, R&B y funk, muy asociado a la vida nocturna y cosmopolita de las grandes ciudades japonesas.

“Dije, ‘¿qué onda en este momento que se empezó a hacer city pop en Japón? ¿Qué onda en Argentina? ¿Qué pasa en ese momento?’ —cuenta Nico—. Y cuando vas y buscás qué pasaba en el mismo momento histórico, te das cuenta de que muchos artistas de rock nacional estaban en esa. Los discos y las tapas son tapas de city pop, tienen la ciudad atrás o el costado blanco. Me pareció re loco eso. Fue como un año de profundizar a full, de excavar y excavar. Y pudimos encontrar joyas de city pop de Argentina. Este disco es todo argentino, no hay nada de Japón. Es la esencia, esos 10 segundos de city pop de Fito, Charly, de Pedro, de Miguel Abuelo, están todos plasmados en el álbum”.

Mir Nicolas - Devoto (Prod. Lulo)

La búsqueda no fue fácil: “La verdad que el R&B y el soul de los 80s y 90s, acá en Buenos Aires, es medio difícil de encontrar porque siempre la gama va para el tango y todos los pibes de la época se iban para el rock —admite Nico—. También, justo cuando estás por encontrar un sample que decís: este es la hostia, de repente hacés un tono de tango y se va todo al carajo. Es una búsqueda re difícil, pero bueno, encontramos unas piezas hermosas, muchas quedaron afuera”.

El trabajo de un productor digger como Nico es de los más nobles y enriquecedores dentro del hip-hop: buscar samples de un género y época concreta en Argentina es un oficio artesanal que requiere paciencia, oído fino y mucho respeto por la música de otros. Antes de producir y escribir, hay un largo proceso de investigación y curaduría; Nico lo hace todo, con precisión y dedicación.

En ese camino está acompañado por productores que cuidan su sonido: Lulo y Valen, presentes en dirección artística, producción y arrangement, llevan seis años trabajando con él y participaron en casi toda su obra reciente, incluyendo singles y algunos EPs de su vertiente más trapera, como Gran Turrismo (2023) y Guaso Guaso Vol. I (2024). “Ingrávidos puso algo entre lo futurístico y lo vintage. Siempre hay rincones para unificar mundos”, sintetiza Nico. Este equipo de amigos productores, sumando a Tomy Velazquez, son los guardianes de los beats y el arte de Nico. Esto no es un dato menor: su fórmula sigue siendo ser el productor que genera un ping-pong entre un mismo equipo.

El nuevo álbum está casi todo producido por mí también —afirma Nico—. Pero bueno, los pibes también están muy involucrados: Valen, Lulo, Tomy Velazquez. Hubo grabaciones con sesionistas, al igual que en Spinettaje. Yo produzco tranquilo, acá en mi casa, después lo mando a refinar, a curar y a hacer arrangements”. Con ese equipo, sumado a Manuel Cano en mezcla y masterización y Manuel Pons en la dirección de los videos, Nico está por salir a la cancha con su próximo LP: La ciudad del pop, disco que presentará el domingo 12 de octubre en Teatro Vorterix.

Mir Nicolas - Deseos (Prod. Lulo)

“Lo principal, lo primordial, es elegir las mejores muestras, los mejores discos, las mejores barras —explica el artista—. En este disco siento que puedo rimar mucho más tranquilo y pensar cada segundo, cada barra que voy a tirar. Tuve tiempo, tranquilidad y madurez para encarar una nueva apuesta: un género, nuevas ideas, nuevas influencias, para ver a dónde me lleva el city pop. Además de la producción, también tenés que escribirlo, hacer la transcripción, bajar la data. Pero la verdad que estoy re contento, es un sueño hacer un disco así”.

Jorge Luis Borges, en su ensayo sobre literatura gauchesca en Discusión, reflexiona sobre cómo la obra de un artista no surge de la nada: incluso el menor de los hechos presupone un universo entero de experiencias, contextos y saberes previos. Podría decirse que cada canción, cada beat o cada sample llevan consigo siglos de historia, y que el artista necesita todo ese bagaje para crear. Así, cuando Mir Nicolás produce y escribe, hay detrás años de aprendizaje, influencias internacionales y un profundo conocimiento de la historia musical argentina: toda una vida concentrada en cada tema.

Un sonido surgido de historias que no siempre se contaron bien, bajo un velo de rock nacional: tal vez queden muchos géneros por desmenuzar en la historia de la música argentina, pero Mir Nicolás es de los que aportan a esa causa. Y no solo eso: Nico necesitó todos los años previos para que sucediera su creación; con esa conciencia, lo hace como si se hubiera estado preparando toda la vida.

Al escuchar los primeros dos cortes se percibe toda la arcilla maciza que forma al city pop y a géneros que lindan con él: yacht rock, R&B y soul. Se siente un ambiente etéreo, con sampleos frenéticos de SPI Deluxe y fraseos de Mir Nicolás que bailan sobre instrumentales destellantes. Pero, considerando que sus discos siempre superan las expectativas de sus adelantos, La ciudad del pop probablemente tenga aún más que eso.

“A mí me gustan las luces —reflexiona Nico—. Siempre me llamó la atención la estética de Buenos Aires, por la noche es una locura. [El disco] son un montón de vivencias de acá, de Capital, y con unos tintes del barrio que están presentes siempre. Cada beat es una movie, cada tema una peli nueva; de cada tema querés llevarte una visual, una banda sonora y también invitar a la imaginación. Cada tema va a tener su visualizer, pero la idea es que el viaje sea de cada uno. Más que traer un género nuevo, sorprender. Sin dejar en falta raps duros, sin todo lo que ya saben que podemos hacer, ahora también prepárense para cosas experimentales. Este disco me dejó desarrollar también mi parte de productor. También soy re mañoso con los samples. Encuentro una joya y es re loco, porque te motiva a escribir, te toca una fibra. Te mueve un sample, una música, y eso está bárbaro”.

Mir Nicolás.
Mir Nicolás. Foto: Santiago Galafassi.

En la música todo se me hace espiritual —admite—. En otras cosas capaz soy lo más basura que existe, pero la música es algo que me pone meditativo. Es una motivación para hacer rap también ¿viste? Es una motivación, aparte de rapear, ser un buscador. Como los que buscan oro en los bordes de los ríos y todas esas cosas: buscar oro ahí detrás de una historia que no está contada tampoco acá en Argentina. El soul, el R&B, no hay nada de eso porque todo lo que está contado es rock. Y no hay tanto una parte de R&B”.

La ciudad del pop cuenta con feats de los raperos argentinos Cerounno y Santiki, y con invitados internacionales como Crime Apple y nada menos que Lee Scott, productor, rapero, escritor y fundador de Blah Records, una de las primeras grandes influencias del rapero. “Es imposible que no esté mi presencia barrial ahí, pero el disco es la lleca records mal, asfalto de capital. Súper ciudad, 80s, GTA Vice City, referencias como la de Habana y Segurola de Maradona, desde la lírica hasta la estética —adelanta Nico—. Pero es como de esa época en un mundo tecnológico ahora, con estos tintes que me quedan a mí, tanto de estar tranquilo en el centro como de volver al barrio. Pensar desde acá las cosas del barrio. Justo ahora estoy en Devoto, que cruzás acá la avenida y es provincia. Este disco es el entremedio”.

Nico también recuerda la influencia de su tío, quien aparece en la contratapa del disco y en el video de "Devoto". “Mi tío es un personaje en mi vida —cuenta—. Él me enseñó cómo vestirme, cómo ser cool, cómo moverme. Después de todo, él es del barrio también, de mi barrio. Pero me mostró cómo se mueve acá: Te voy a mostrar esto, mirá este lugar espectacular donde se toma y se come increíble, este es un lugar histórico. Vivió mucho la noche de los 80 y 90s. Es mi padrino aparte. Somos re compinches. Es una locura que me haya enseñado tantas cosas y poder compartir este momento con él”.

Nico lo deja todo en su música: raps duros, chicanas políticas con humor, samples buscados por cualquier DJ o productor, y además establece un precedente. Lo que hace deja rastros para la historia y demuestra cómo su búsqueda, su nivel y sus ganas genuinas de reivindicar obras del pasado influyen en la escena. Con todo eso y más, entrevistado el mismo día que salía de viaje a Bariloche, Mir Nicolás se muestra sorprendentemente tranquilo: es como si todo el peso se quedara en la música y él quedara ligero, como si los samples de los vinilos que encontró en el parque le quitaran la timidez.

“También estoy un poco más grande, la verdad —reflexiona—. Ahora estoy más maduro. Priorizo muchas cosas: mi salud, mis amigos, mi familia. Tener las cosas más claras sobre lo que te llena, estar piola con tus amigos, con tu familia, con el mundo en sí, con la sociedad y con lo que uno hace. La verdad es que el resultado del Spinettaje me ha cambiado mucho. Después de todo el laburo que vino después me puso más maduro, priorizando la familia; casi ni salgo. Estoy más acá haciendo canciones o compartiendo con amigos, pero más chill. Y re feliz de que me toque todo esto en esta etapa de mi vida, donde me lo puedo tomar así”.

Mir Nicolás se presenta el domingo 12 de octubre a las 20 h en Teatro Vorterix (Av. Federico Lacroze 3455, CABA) junto a Alkoy. Las entradas están disponibles a través de AllAccess, con un 30% de descuento para socios de la Comunidad Indie Hoy.

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