Luego de 3 años, Violencia es un conjunto de 4 nuevas canciones que nos permite observar a El Mató a un Policía Motorizado en proceso, en construcción. La propuesta de las canciones es un poco distinta a la que mostraban en La Dinastía Scorpio (2012, Discos Laptra); un álbum que los terminó de consolidar en tanto sonido, producción y concepto. Probablemente, el gesto que subyace a este maxi-simple es mostrarlos en movimiento, no solo sumando nuevo material sino incorporando nuevos sonidos y estructuras, aunque todavía con una impronta que remite fuertemente a sus anteriores trabajos.
El espíritu de esta Violencia es un síntoma intersticial. Como podemos suponer, la búsqueda de sonido en una banda como El Mató no es tan sencilla como para otras bandas de menor proyección: es un problema que implica, para una banda de su trayectoria, mayores riesgos. Y que, aún así, tiene implicancias positivas de base, en cuanto representa un posicionamiento de status: la banda–o su marca, o lo que significa la banda, más allá de sus miembros en concreto- ya no dialoga al mismo nivel que otras porque ha dado saltos de calidad musical, de público, de aval crítico, de influencia sobre otros proyectos, que la distinguen de una manera extremadamente valiosa y única. Son una suerte de hermanos mayores de una gran multitud de bandas que, si no fuera porque ellos abrieron camino entre la maleza a fuerza de machetazos en forma de canciones, probablemente no serían lo que son hoy.
Está claro que El Mató no debe demostrarle nada a nadie a esta altura. Sin embargo, el deseo de disfrutar sus canciones se mezcla con el de la curiosidad de cada quien que se interese por seguir la carrera de la banda. En ese sentido, Violencia solo nos muestra las canciones de manera concreta, pero no permite vislumbrar de manera lo suficientemente clara y concisa si en la banda se instalará una búsqueda de sonido que renueve su propuesta, la cual es una evolución continua fiel a un estilo que depende de pocos elementos; cada vez más ajustados y pulidos, ya lejos de la suciedad espacial que arrastraban en su trilogía de EPs. Algo que pareciera estar solo insinuado en estas canciones. Que, por lo pronto, son una más que buena razón para disfrutar y mantenernos expectantes.
El mató a un policía motorizado – Violencia
2015 – Discos Laptra
01. Violencia
02. El Baile de la Colina
03. Rucho
04. Aire Fresco