Se puede decir que de todas las bandas del Reino Unido que quisieron ser los nuevos Smiths –y hay muchísimas en la lista- y tener ese cantante con voz personal y pluma predilecta para tocar la fibra sensible de la gente, fue la banda de Martin Rossiter, Gene, la que realmente tenía todo para heredar el trono –decimos “tenía” porque después esto se desinfló y Gene terminó siendo solo un buen recuerdo. Algo es algo. A veces no está mal ser un recuerdo.
Olympian fue el nombre del disco que a Gene le valió el éxito y las buenas críticas, además de giras por Estados Unidos y un disco de plata que hoy debe brillar en la casa de Rossiter – después de desarmar Gene, Rossiter se armó de tiempo libre y pudo sacar algunos discos solistas bastante dignos-. Pero volvamos al disco que dejó bien parado a Gene, el disco que le dio esa popularidad que muchos buscan y nunca encuentran. Olympian salió en 1995, y al instante fue recibido con los brazos abiertos por críticos y fanáticos. El disco de Gene abría con un rock ganchero que se sostenía sobre un riff efectivo y simple, y la cosa seguía bien: se mantenía el clima y la onda, canciones de arpegios que se desarman en la mitad del viaje para darle lugar al estribillo ruidoso pero con clase, eso sí, Gene tenía mucha clase y muchas ganas de demostrar que esa clase no era casualidad. El disco era parejo y la interpretación de Rossiter iba subiendo de tono a media que las canciones iban pasando. Hay que decir algo: si bien Gene tenía y quería lograr esa forma de canción a lo Smiths –la crítica también se encargó de compararlos todo el tiempo-, los de Martin Rossiter eran mucho más rockeros a la hora de pisar el pedal –que no se me enoje nadie, no quiero decir que The Smiths no tenía rock, pero si escuchan Olympian se van a dar cuenta enseguida a qué me refiero con esto. Gene le puso rock a tanta melodía pop de los de Morrissey y Marr-. Quizá el mayor acercamiento de Gene a The Smiths viene del costado vocal.
A pesar de este éxito, a Gene no le importó nada, vio que nunca iban a pasar al salón de los grandes, y decidió colgar los guantes. Si lo pensamos puede que fue por desidia personal, o por alguna razón más importante que uno desconoce. Lo cierto es que no dieron muchas razones y se tomaron el palo en el 2004. Se dice que lo difícil no es llegar, sino mantenerse, y esto funciona como un axioma en la carrera de Gene.
Igual, vamos terminar bien la cosa: a pesar de todo análisis, crítica, o como se le quiera decir a esto, Gene dejó un terrible disco, que por suerte, hoy con esto de la tecnología ponés en YouTube “Gene, Olympian, full album” y el disco suena enterito mientras vos terminás de comer y mirás la tv en mute, como se debe ver la televisión, en mute.
Gene – Olympian
1995 – Costermonger / Polydor
01. Haunted by You
02. Your Love, It Lies
03. Truth, Rest Your Head
04. A Car That Sped
05. Left-Handed
06. London, Can You Wait?
07. To the City
08. Still Can’t Find the Phone
09. Sleep Well Tonight
10. Olympian
11. We’ll Find Our Own Way