Para muchas personas, la herencia es sagrada. Las costumbres, tradiciones y bienes que se pasan de generación en generación suelen tener un valor esencial para la gran mayoría de la gente y la música forma parte de ese intercambio hereditario.
El gusto musical se trasmite de padres y madres a hijos, de tíos a sobrinos y de abuelos a nietos. Bandas, discos, e incluso canciones sirven de nexo entre familiares, logrando generar un vínculo afectivo ligado a un recuerdo o momento en particular.
Es por ese motivo que el sitio Loudwire se propuso elaborar una lista con los discos que son tan indispensables como para que un padre se los pase a un hijo. La elección va desde álbumes de rock clásico como Led Zeppelin IV hasta LPs pioneros como London Calling o Never Mind The Bollocks.
Black Sabbath – Paranoid (1970)
Considerado por muchos como el primer álbum de heavy metal de la historia, Paranoid de Black Sabbath es una obra seminal que trasciende el tiempo. Con himnos atemporales como “War Pigs” y “Iron Man”, este disco estableció los cimientos del metal y sigue resonando con fuerza hasta el día de hoy.
The Clash – London Calling (1979)
London Calling es un punto culminante en la escena punk británica y una declaración de irreverencia y autenticidad. Con letras que abordan temas sociales y políticos, este álbum capturó la energía cruda y la actitud desafiante del incipiente movimiento. Desde la icónica portada hasta los himnos como “London Calling” y “Lost in the Supermarket”, este disco desafió las convenciones para volverse indispensable.
Sex Pistols – Never Mind the Bollocks, Here’s the Sex Pistols (1977)
Con su título provocativo y su actitud desfachatada, Never Mind the Bollocks, Here’s the Sex Pistols es un manifiesto del punk británico. Este álbum encapsuló la rabia y la frustración de una generación alienada, con canciones como “Anarchy in the U.K.” y “God Save the Queen” que se convirtieron en himnos de la contracultura. Es un testimonio de la potencia del punk como una fuerza disruptiva y subversiva en la música popular.
Rush – 2112 (1976)
2112 es una obra maestra del rock progresivo que expandió los límites del género. Este álbum conceptual narra una historia épica ambientada en un futuro distópico, fusionando letras introspectivas con pasajes instrumentales virtuosos. Con su ambición artística y su ejecución magistral, 2112 posicionó a Rush como una de las bandas más innovadoras e influyentes del rock.
Pink Floyd – The Dark Side of the Moon (1973)
The Dark Side of the Moon de Pink Floyd es un viaje expansivo sin retorno, que explora temas universales como el tiempo, la muerte y la alienación. Con su ingeniosa combinación de rock progresivo, jazz y música electrónica, este álbum estableció nuevos estándares en cuanto a producción y experimentación sonora en el estudio.
Kiss – Alive! (1975)
Alive! es un testimonio de la energía y la espectacularidad del hard rock en su forma más pura. Grabado en vivo, este álbum capturó la intensidad de los conciertos de Kiss, con himnos como “Rock and Roll All Nite” y “Hotter Than Hell”. Es una celebración de la fuerza del grupo en vivo y la conexión única entre la banda y sus seguidores.
The Beatles – Let It Be (1970)
Let It Be de The Beatles fue un último suspiro de genialidad por parte del conjunto de Liverpool que marcó un antes y un después en la carrera de cada uno de sus miembros. Con su mezcla de baladas melódicas y rock enérgico, este álbum capturó la madurez artística de los Beatles y su ingenio incluso en la austeridad. Desde la nostálgica “Across The Universe” hasta la cruda “Get Back”, este disco es el legado de una de las bandas más influyentes de todos los tiempos.
Fleetwood Mac – Rumours (1977)
Rumours es una obra compleja y detallada sobre el drama y la pasión creativa que impulsó su creación. Con letras que exploran el amor, la pérdida y la traición, este disco manifestó la intensidad emocional de las relaciones interpersonales. Con hits como “The Chain” y “Dreams”, Rumours se convirtió en una obra maestra del soft rock.
David Bowie – The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders From Mars (1972)
The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders From Mars de David Bowie es un viaje a través de los confines del espacio y la identidad. Con su personaje principal y su narrativa sci-fi, este álbum encapsula la extravagancia y la innovación de Bowie como artista. Desde la majestuosidad de “Starman” hasta la melancolía de “Rock ‘n’ Roll Suicide”, este disco trasciende las barreras del género y se convierte en un monumento a la creatividad ilimitada.
Led Zeppelin – Led Zeppelin IV (1971)
Led Zeppelin IV es una joya indispensable del rock clásico que muestra a todas luces la destreza musical y creatividad de Led Zeppelin en su apogeo. Con himnos atemporales como “Stairway to Heaven” y “Black Dog”, este disco combina la fuerza del blues con la épica del rock para crear una experiencia difícilmente olvidable. Es un pilar del rock y una piedra angular en la carrera de una de las bandas más influyentes de la historia.