Brian May es una de las máximas referencias a la hora de hablar de guitarristas. Al igual que cualquier músico, el violero de Queen creció escuchando a distintos referentes de las seis cuerdas de los cuales tomó inspiración para dar con su estilo. Uno de sus máximos modelos a seguir fue Rory Gallagher, el difunto artista irlandés que supo formar parte del power trío de blues rock, Taste, y que, en palabras de May, era capaz de todo.
Según recuerda Far Out Magazine, May admitió que su colega británico era uno de sus ídolos durante su juventud y afirmó: “Su forma de tocar era increíble. Es una de las pocas personas de esa época que podía hacer que su guitarra hiciera cualquier cosa. Parecía simplemente magia. Recuerdo mirar esta Stratocaster maltrecha y pensar ¿cómo sale eso de ahí? ¿Cómo lo hace?”, agregó en una entrevista para What’s Going On – Taste Live At The Isle Of Wight.
El día que conoció a su ídolo
En otra parte de la nota, May recordó: “Éramos niños, así que nos quedábamos y escondíamos cuando la marquesina estaba a la hora de cerrar, y después nos acercábamos como si tuviéramos que estar ahí y decíamos: ‘Oh, hola, señor Gallagher’. ¿Podemos charlar con usted?’. Fue increíblemente paciente. […] Yo le pregunté: ‘¿Cómo se consigue el sonido? ¿Qué es?’ y él respondió: ‘Oh, es muy simple, tengo esta guitarra y tengo este pequeño amplificador AC 30, que no se parece a nada más, y tengo este otro de agudos, un Range Master, y de ahí viene el sonido’”.
“Te diré qué más aprendí de Rory: a no ser un idiota. Hay mucha gente a la que le dices: ‘¿Puedo hablar contigo?’ y responden: ‘Estoy demasiado ocupado’. Sea como sea, Rory siempre fue un caballero. Siempre tuvo tiempo para sus fans. Muchas, muchas veces me encontré con él y siempre era el mismo. Creo que la última vez que me encontré con él fue en algún estudio de Shepherd’s Bush. Fue exactamente lo mismo”, sentenció May.