Desde que a raíz de movimientos como #MeToo y #TimesUp un sinnúmero de personas se han sincerado respecto de las situaciones de acoso y abuso que han sufrido en estos años, sabemos que salieron a la luz miles de testimonios que han devenido en escándalos que han involucrado a figuras como Kevin Spacey, Harvey Weinstein y James Franco.
Lo cierto es que en el caso de Woody Allen, los señalamientos en su contra datan de varios años antes de estas campañas e incluso es conocido que hasta hubo una batalla legal de por medio hace unas décadas llevada a cabo por su ex esposa Mia Farrow en defensa de su hija en común, Dylan Farrow. Tampoco podemos pasar por alto que Woody fue absuelto en su momento por la Justicia respecto de los cargos que se le pretendían inculpar, pero diversas cartas públicas publicadas por Dylan han reabierto la discusión en varias oportunidades. Una de ellas fue durante 2014, justo en la época de la promoción de Blue Jasmine, el filme tragicómico que fue estelarizado por Cate Blanchett y que la hizo merecedora del Premio Oscar a Mejor Actriz Principal en ese mismo año.
Si bien la mencionada glamorosa artista no se había pronunciado antes concretamente respecto de tal asunto (el del posible abuso cometido por Allen en contra de su propia hijastra), Dylan publicó hace poco otra carta en la que arremete con fuerza a criticar y tildar de hipócritas y pocos solidarios a los artistas que han trabajado con Woody estos últimos años. Pero hace poco, en una entrevista con Christiane Amanpour de la cadena CNN, la talentosa rubia Blanchett comentó al ser cuestionada respecto de su silencio frente al tema:
“No pienso que yo haya permanecido en silencio. En el momento en el que trabajé con Woody Allen no sabía nada de esas acusaciones. En tal momento dije que era una situación muy dolorosa y complicada para la familia, y que esperaba que tuvieran la capacidad de resolverlo”.
Más adelante complementó argumentando:
“Si estás acusaciones necesitan ser reexaminadas, que según sé ya pasaron por la corte, entonces soy una gran creyente del sistema judicial y de los precedentes legales. Si el caso necesita ser reabierto, de corazón, apoyaría totalmente esa medida”.
De cualquier modo, también aclaró que las redes sociales no son, ni deben ser jurados de asuntos que solo le corresponden a los órganos judiciales, y adicionó:
“Siento que esto debe ir a tribunales, así que si esos abusos han sucedido, la persona debe ser procesada y de ese modo algunos que no hacen parte en la brillante industria en la que estoy pueden usarlo como un precedente legal para protegerse a sí mismos”.
Hasta el momento, el caso judicial en cuestión sigue cerrado. Mientras tanto, otros artistas continúan haciendo públicas sus posiciones respecto a este espinoso tema, como Diane Keaton que lo defiende y, por otra parte, Timothée Chalamet que decidió donar el dinero del sueldo que recibió por trabajar en un reciente filme del director.