A lo largo de su extensa carrera, David Bowie lanzó más de 20 discos de estudio que quedaron marcados a fuego en la memoria y el corazón de millones de fans alrededor del mundo. Uno de esos fanáticos y admiradores es nada más y nada menos que Damon Albarn. El líder de Blur y Gorillaz habló en más de una oportunidad sobre su admiración por el Duque Blanco e incluso rememoró la vez que estuvo cerca de grabar un disco con él. Esa posibilidad que nunca llegó a concretarse todavía le resuena y es algo que aún se lamenta.
El disco que marcó un quiebre
Al igual que cualquier otro melómano, Albarn tiene un disco favorito de Bowie. Se trata de Low, el undécimo álbum del músico británico publicado por RCA Records el 14 de enero de 1977 y la primera de las tres colaboraciones de Bowie con Brian Eno y el productor Tony Visconti que juntas formaron la conocida Trilogía de Berlín. Sobre este trabajo, el artista dijo: “Es el sonido de David y Brian absorbiendo el punk y luego llevándolo a Berlín para producir un disco futurista, justo en la primera línea de la Guerra Fría”.
Low incluyó temas como “Breaking Glass”, “Speed of Life”, “Sound and Vision” y “Always Crashing in the Same Car”. Ampliamente aclamado por la prensa con el paso de los años, fue un disco que tocó temas difíciles, pues Bowie lidiaba con adicciones: “Hay mucho dolor en el álbum Low. Ese fue mi primer intento de alejarme de la cocaína, así que fue muy doloroso. Y me mudé a Berlín para hacerlo. Salí del centro del mundo de la cocaína hacia el centro del mundo de la heroína. Afortunadamente, no tenía ninguna tentación hacia la heroína, así que no fue una amenaza” declaró sobre este álbum en la revista Details.