Kendrick Lamar volvió a ser acusado de infringir derechos de autor con su canción en colaboración con Rihanna, “LOYALTY.”.
Según reportó el medio Music Business Worldwide, el rapero de Compton fue demandado por el productor Terrance Hayes, quien presentó su caso en la Corte Federal de California el viernes 21 de agosto alegando que el single “copió toda la composición, incluido el título, la melodía, la armonía y el ritmo” de un tema del mismo nombre que él grabó junto a su colega Josef Leimberg, quien trabajó con Lamar en su tercer disco titulado To Pimp A Butterfly.
Siempre acorde a lo publicado por el citado portal, el documento señala que Hayes grabó su creación en el estudio Ironworx Creative Recordings junto a Leimberg, en cuya computadora quedaron todas las grabaciones de esas sesiones, y la registró en la Oficina de Derechos de Autor de EE. UU.
Además de apuntar contra el artista ganador de múltiples premios Grammy, el músico señaló como culpables del caso al sello Top Dawg Entertainment, al mencionado Leimberg y al productor de la canción, Terrace Martin, quien habría tenido acceso a su trabajo gracias a su relación con Josef.
Hayes también aseguró que para disimular el hecho, el tema fue ralentizado “a través de un sintetizador y [combinado] con otro sample”.
“La canción infractora copia porciones sustanciales cualitativas y cuantitativas de la pista en cuestión, incluido el mismo título, tema similar, combinaciones de notas y estructuras sustancialmente similares, melodías, temas, ritmo y patrones de bombo y caja”, afirma la presentación.
“Ambas utilizan las mismas progresiones de acordes, melodías y otros aspectos en todo momento, y ninguna presenta cambios en los elementos musicales a medida que las grabaciones avanzan hacia sus conclusiones”.
Hayes exige un juicio con jurado y uno de los resultados que busca es que “se le otorguen todas las ganancias de los acusados”, además de “cualquier otra ventaja monetaria obtenida por ellos a través de su infracción, la cantidad exacta a acreditar en el momento del juicio”.
“Debido a los actos de infracción de derechos de autor de los Demandados como se alega en este documento, los Demandados, y cada uno de ellos, han obtenido ganancias directas e indirectas que de otro modo no habrían obtenido de no haber sido por su infracción de los derechos del Demandante sobre las grabaciones de sonido con derechos de autor del Demandante. Como tal, el Demandante tiene derecho a la devolución de los beneficios de los Demandados atribuibles directa e indirectamente a las infracciones de los Demandados de sus derechos sobre las grabaciones de sonido en una cantidad que se establecerá en el juicio”, agrega el escrito.
Cabe recordar que esta no es la primera vez que Kendrick Lamar se enfrenta a una circunstancia similar, ya que en 2018 él y SZA fueron demandados por su canción de la banda sonora de Black Panther, “All The Stars”, antes de que Yeasayer también lo llevara a la corte junto a The Weeknd por “Pray For Me”, otro tema que integró el soundtrack de la película del héroe de Marvel.