La edición de 1969 del festival Woodstock estuvo plagada de leyendas de la música. Jimi Hendrix, Janis Joplin, Grateful Dead, Joan Baez, Creedence Clearwater Revival, The Who, Jefferson Airplane y Crosby, Stills, Nash & Young, entre otros, fueron parte del recordado evento que tuvo lugar en la granja lechera de Max Yasgur en Bethel, Nueva York. Si bien el festival contó con la presencia de algunos de los nombres más grandes de la historia del cuarto arte, lo curioso es que solo uno de los más de 30 artistas y bandas que pisaron el escenario de Woodstock alcanzó a saborear el éxito de tener una canción propia en el número uno de los ranking en toda su vida.
Según recuerda Far Out Magazine, Joplin, con su track “Me and Bobby McGee”, llegó a la cima del Billboard Hot 100, pero el hecho ocurrió unos meses después de la muerte de la cantante en 1970, mientras que Neil Young hizo lo propio con “Heart of Gold”, tema que pertenece a su discografía en solitario y no como parte de CSNY. Mientras tanto, Creedence Clearwater Revival arañó el número uno varias veces, ya que colocó cinco de sus creaciones en el segundo peldaño de los charts.
Soul, pop y rock en el número 1
El listado de artistas que se presentaron en Woodstock y alcanzaron el primer puesto se reduce a un solo nombre: Sly & the Family Stone, el grupo cuya música mezclaba soul, pop y rock. Liderado por Sylvester Stewart, mejor conocido como Sly Stone, la banda oriunda de San Francisco (California) se convirtió en uno de los grupos más populares de Estados Unidos, motivo por el cual fueron elegidos por la organización del festival para encabezar el día sábado junto a The Who y Jefferson Airplane, pero debido a los retrasos provocados por las condiciones climáticas que azotaron el lugar, su show se retrasó hasta las 3:30 am del domingo.
Así fue cómo, durante su electrizante presentación, Stone y compañía interpretaron el único #1 del evento titulado “Everyday People”, track que integró el cuarto álbum del conjunto, Stand!, y que durante febrero de 1969 llegó a la cima de las listas de éxito, siendo, paradójicamente, escoltado por “Proud Mary” de Creedence Clearwater Revival que se ubicó en el segundo puesto.