BoJack Horseman es una de las series animadas más aclamadas de todos los tiempos gracias a su irreverencia. Muy al estilo de Los Simpson, el hombre-caballo y sus amigos a menudo bromeaban sobre ciertos personajes y elementos de la cultura pop contemporánea.
No obstante, aunque pareciera que el humor del show no tenía filtros de ninguna índole, hace poco Raphael Bob-Waksberg (creador de la tira) reveló que Netflix le pidió que cambiara un chiste de la primera temporada porque sus ejecutivos “estaban preocupados de que pudiera molestar a David Fincher“.
Desde su cuenta de Twitter, el guionista y productor expresó su sorpresa ante el hecho de que Dave Chapelle tuviese un acuerdo que le permite decir lo que quiera en sus sketches de comedia sin ninguna clase de cortes o edición.
En ese mismo hilo, Bob-Waksberg comentó que su broma sobre el director tenía que ver con la icónica escena de la caja en la película Seven y se habría desarrollado en el séptimo episodio del show. La misma se centraba en una charla entre Princess Carolyn y Fincher que empezaba con él saludándola con la palabra “Puta”. A continuación, podés leer la versión en inglés de esa secuencia compartida por el propio Raphael hace unas horas.
Con respecto a las razones detrás de esta decisión de la plataforma de streaming, vale recordar que por entonces Fincher ya había iniciado un vínculo contractual en House of Cards, una relación que más adelante se extendió debido a la llegada de producciones como Mindhunter o Mank. Resulta entonces un tanto lógico que Netflix haya querido resguardarse de ofender de cualquier manera al cineasta.
Meses atrás, Bob-Waksberg habló sobre la posibilidad de un spin-off de BoJack Horseman.