Pocas formas de tributo son tan elocuentes como reinterpretar una canción ajena y hacerla propia. En el caso de Lou Reed, un referente indiscutido del rock alternativo ya sea en solitario como al frente de The Velvet Underground, los homenajes abundan.
La influencia del artista estadounidense, quien falleció en 2013, se extiende más allá de estilos o generaciones, y su cancionero sirvió como el punto de partida para transformaciones tan diversas como valientes. A continuación, repasamos seis versiones que rinden culto a su genio sin caer en la mera imitación.
U2 – “Satellite of Love”
Para el lado B de “One”, U2 rescató este brillante corte del álbum Transformer (1972), producido por David Bowie. Su versión mantiene la dulzura melódica de la original, pero suma una épica emocional más cercana al universo de Bono.
R.E.M. – “Pale Blue Eyes”
Michael Stipe y compañía nunca disimularon su devoción por Velvet Underground. De hecho, incluyeron varias canciones de Reed como caras B a lo largo de su carrera. Entre ellas, “Pale Blue Eyes” destaca por su sutileza.
Billy Idol – “Heroin”
Probablemente la versión más polémica de esta lista, y por eso mismo una de las más audaces. En 1993, Billy Idol decidió llevar el clásico desgarrador de The Velvet Underground & Nico a un territorio inesperado: la electrónica industrial con tintes techno.
Julian Casablancas – “Venus in Furs”
El líder de The Strokes supo canalizar la energía neoyorquina de Reed como pocos. Su versión de “Venus in Furs”, grabada especialmente para la serie Vinyl (2016), respeta el misterio y la tensión de la original, pero lo filtra a través de una lente más espectral y distorsionada.
David Bowie – “White Light/White Heat”
El vínculo entre Reed y Bowie fue artístico, fraternal y simbiótico. Bowie, en plena era Ziggy Stardust, hizo de “White Light/White Heat” un himno glam, impulsado por la guitarra feroz de Mick Ronson. En sus presentaciones en vivo, el tema se transformaba en un torbellino eléctrico.
Duran Duran – “Perfect Day”
Duran Duran sorprendió al abordar uno de los temas más delicados del repertorio solista de Reed. “Perfect Day“, con su melancolía velada y su ambigüedad lírica, encuentra en la banda británica una lectura sobria y emocional.
