A pocos días de volver a Argentina, Paul McCartney estuvo el miércoles en Minneapolis y, como no podía ser de otra manera, le dedicó el show al recientemente fallecido Prince. “Prince, Minneapolis; Minneapolis, Prince. Van juntos”, haciendo referencia al lugar de origen del músico funk.
En su encore, McCartney versionó “Let’s Go Crazy“, uno de los clásicos incluidos en Purple Rain. El escenario se tiñó de morado y el Love Symbol acompañó desde atrás. Podés ver el video de la presentación a continuación: