A lo largo de su historia, el festival de Glastonbury no solo fue escenario de grandes y memorables actuaciones, sino también de significativos banneos. Ya sea por disputas con la organización, principios firmes o decisiones polémicas, varios artistas quedaron al margen de Worthy Farm. A días de una nueva edición, que se celebrará del 25 al 29 de junio, repasamos los músicos y bandas prohibidos y los nombres que rechazaron subirse al famoso escenario.
Los artistas expulsados de Glastonbury
El caso más anecdótico es el de Leslie George Carter, miembro de Carter The Unstoppable Sex Machine, quien tras una pelea con el presentador Phillip Schofield fue prohibido de por vida. La organización envió además una carta confirmando su veto, luego de que Michael Eavis, el fundador del evento, expresara su enojo por la controversia y el proceso de profesionalización del festival.
Otro nombre célebre que quedó fuera fue el de Mark E. Smith, líder de The Fall, cuya reputación de impredecible sumada a sus hábitos caóticos de consumo de alcohol lo convirtieron en una figura difícil para los organizadores. Aunque la banda tenía todo lo necesario para ser convocada, Smith fue vetado informalmente por su comportamiento errático. A esto se sumó su acalorado descargo en contra de Eavis después de que este colocara a James por sobre su banda en 1992.
La banda Killdren, conocida por su postura antifascista, también fue baneada del line-up en 2019 luego de que se viralizara su canción “Kill Tory Scum (Before They Kill You)”. El título generó una ola de críticas en la prensa conservadora y Glastonbury optó por eliminarlos para evitar mayor controversia. Algo similar ocurrió con el comediante Paul Currie, quien denunció en 2024 haber sido desinvitado del festival tras discutir con un espectador sobre Palestina.
Los artistas que rechazaron participar
Duran Duran no fueron expulsados del evento, pero rechazaron sistemáticamente actuar porque no les ofrecieron el escenario principal en horario estelar. El frontman Simon Le Bon explicó que ellos consideraban indigno tocar en escenarios menores o en horarios secundarios. Algo similar ocurrió con Queen, cuando Brian May se negó rotundamente a presentarse mientras Eavis apoyara el exterminio de tejones, una causa contra la que el violero militaba activamente.
Por su parte, The Black Keys se bajaron tras recibir lo que describieron como una oferta "insultante", mientras que Fleetwood Mac estuvo cerca de tocar en 2020, pero rechazaron la invitación por motivos económicos. De igual manera, The Kinks fueron anunciados para la primera edición en 1970, pero decidieron bajarse cuando leyeron que era un "mini festival". De hecho, Ray Davies fingió una laringitis para evitar el compromiso.